La Catedral de Santiago de Compostela es mundialmente reconocida, por su arquitectura y belleza, como uno de los iconos eclesiásticos más significativos de España, pero esta no es su característica más significativa, la edificación se encuentra construida sobre la tumba del apóstol Santiago el Mayor que constituye la última parada del peregrinaje conocido como El Camino de Santiago. Muchas son las personas que se aventuran a recorrerlo, conociendo el maravilloso paisaje del norte de la península Ibérica, su cultura y gastronomía. A continuación, les dejamos algunos consejos y consideraciones a tener en cuenta para disfrutar al máximo esta experiencia.

Preparación física. Las distintas rutas del camino van a poner a prueba tu forma física y mental, practicar deportes es un gran paso de avance antes de aventurarte a recorrer los kilómetros hasta la Catedral, no es recomendable comenzar el peregrinaje sin antes haber realizado la preparación necesaria pues corres el riesgo de lesionarte o no aguantar el rigor de la marcha. Realiza caminatas similares en distancia y condiciones a las del sendero que vayas a recorrer usando el calzado, la indumentaria y la mochila cargada con el peso que vas a llevar. Comienza por distancias cortas en zonas con poca pendiente y eventualmente ve aumentando la complejidad del circuito aumentando la distancia e incluyendo pendientes pronunciadas, por último, incorpora la mochila y cuando te sientas cómodo podrás enfrentarte a la ruta sin temor a tener que retirarte antes de alcanzar tu meta.

Elegir el Camino. Son muchas las elecciones que puedes hacer, para decidirte debes tener en cuenta cuántos días dispones para la marcha, cuánta distancia vas a recorrer y de dónde vas a partir. Una buena práctica es calcular cuánto terreno puedes cubrir en cada jornada para, según el tiempo del que dispongas, puedas elegir la ruta que más te acomode. Ten en cuenta que el camino no se trata solo de andar y cubrir la distancia en el menor tiempo posible, también será una experiencia social donde podrás conocer personas de distintas nacionalidades, crear lazos de amistad, camaradería, también descubrirás la rica y diversa cultura española y podrás visitar los sitios de interés en cada destino. Por tanto planifica un tiempo en cada parada para dedicarlo a visitar los sitios por los que vas pasando, esto te servirá también para descansar. La ruta más conocida y por tanto la más usada es el Camino Francés, este cuenta con muy buena señalización por lo que no necesitarás echar mano de la guía, aunque siempre es útil tenerla cerca. Al ser el más famoso entre los peregrinos brinda más opciones de alojamiento y servicios, también es el más rico en historia y cultura.

Época del año. Definir en qué época del año vas a emprender este apasionante viaje es muy importante. Las mejores épocas son primavera y otoño, ya que no son tan transitados los caminos y encontrar albergue y servicios disponibles es fácil para el andante, el clima de estas épocas es más noble que en verano. Esta última es la estación que más turistas registra debido a la disponibilidad de tiempo por las vacaciones, el clima es favorable pero el calor puede jugarte malas pasadas así que es recomendable protegerse e hidratarse. También debes planificar bien los alojamientos, pues en muchos lugares los encontrarás a máxima capacidad. Por último el invierno es más complicado, debes cargar con extra peso debido a la ropa necesaria para aguantar las inclemencias del tiempo, también encontrarás que la mayor parte de los servicios y alojamientos se mantienen cerrados.

Mochila. Debes tener mucho cuidado pues cargar con peso extra puede reducir tu rendimiento. Primero debes elegir la mochila correcta para ti, ligera, anatómica y del tamaño correcto. El peso varía, pero se recomienda que no sea mayor a 10 kg o al 10% de tu masa corporal. Otro aspecto a considerar es la distribución de tus pertenencias, empácalas por separado en bolsas, si son impermeables mejor, dejando arriba y en los bolsillos laterales lo que más uses. No carguen de más y eviten los “por si acaso”.

Calzado. Para garantizar la comodidad en la marcha debes elegir el calzado adecuado, no importa si sean botas o zapatillas deben adaptarse a tu pie y ser ligeras. En dependencia de la época del año que elijas debes buscarlas impermeables. Recomendamos que no las estrenes en la primera jornada, pueden causarte rozaduras y molestias, úsalas antes sobre todo en la preparación física previa al camino, así puedes notar si son las correctas para ti y tener tiempo para cambiarlas.

Alojamiento. Durante todo el recorrido encontrarás alojamientos, los más populares por su bajo precio son los albergues, estos constan de literas que vas a compartir con otros peregrinos, así que debes tener en cuenta que el respeto es fundamental para garantizar el descanso. Si requieres un poco más de comodidad y tu presupuesto te lo permite podrás disponer de una habitación en un hostal o pensión. Ten en cuenta que la entrada a la mayoría de los albergues es por orden de llegada y en dependencia de la época del año puede haber mucha afluencia de caminantes.

Documentación del peregrino. Antes de comenzar la ruta debes solicitar tu credencial en las Asociaciones de Amigos del Camino que existen en cada provincia. Esta identificación la usarás para registrar tu paso por cada destino del camino (albergue, hoteles, bares…) y al finalizar puedes presentar tu credencial y solicitar la Compostela que acredita que terminaste el camino. No debes olvidar tu DNI o identificación, así como la tarjeta sanitaria.

Cayado. Por último, te voy a hablar del cayado o bastón del peregrino. Este es un complemento indispensable para el caminante, ayuda a descargar el peso del cuerpo lo cual representa un descanso para las piernas y mantienes tus manos en movimiento. Los podrás encontrar que llevan desde un bastón de madera rústico hasta uno de trekking.

Como habrás notado hasta ahora es indispensable prepararte bien para aventurarte en la ruta del peregrino. Estudia las guías para tener más información y ponte metas que sepas que puedes cumplir. El Camino de Santiago es una experiencia inolvidable y te demostrará que con voluntad todo se logra.